La película, creada por Ivan Reitman, fue un éxito en los 80 y marcó a toda una generación. La cinta trata sobre cuatro investigadores de hechos paranormales, quienes crean una empresa en Nueva York para poder limpiar la ciudad de fantasmas. Tuvo tan buena aceptación del público que llegó a convertirse en una de las piezas más importantes de esa década, junto con “Volver al Futuro”, “Los Goonies”, entre muchas más. Luego tuvo su secuela y, actualmente, su tercera parte se encuentra en desarrollo, con un reparto diferente para los personajes protagónicos, aunque el elenco original tendrá su participación también. Hoy te traemos datos interesantes de rodaje sobre “Cazafantasmas”.
Los actores principales
La mayoría cree que el director fue muy bueno a la hora de elegir a los personajes que hicieron posible esta excelente historia. Su química en la gran pantalla fue lo que convenció a los espectadores. Pero el equipo admitió que, en un principio, esa no era la lista de los elegidos. Los originales eran John Belushi, Eddie Murphy y Dan Aykroyd. Posteriormente, se escogió a Harold Ramis y Bill Murray, para que acompañasen al co-guionista (el intérprete de Ray Stantz en la película). En cuanto a Belushi, la triste realidad es que no pudo participar en el proyecto debido a que falleció por sobredosis en 1982: se encontraban trabajando en el libreto de la cinta y, la mañana en que se enteraron de la noticia, estaban escribiendo una línea para él.
El casting animal
La selección del papel de Dana Barrett fue algo fuera de lo normal. Sigourney Weaver acababa de filmar grandes largometrajes como “Alien” (el éxito de Ridley Scott, estrenado en 1979), pero quería dar un giro en su carrera y cambiar de aires. Así llegó a esta producción, en la cual se preparó para el proceso de selección de reparto. Tuvo que interpretar una escena en la que no debía emitir palabra, sólo tenía que ladrar. Sí, tal como lo leíste. La actriz tuvo que convertirse en un perro y realizar la voz que producen los caninos. Al parecer, fue muy convincente y quedó dentro del equipo.
Diferente título
“Ghost Smashers” iba a ser su nombre. No sólo eso, sino que su guion también tenía varios cambios. La historia se situaba en el futuro, en donde los protagonistas viajaban por el tiempo (hubiese sido un poco parecida a “Back to the Future”, ¿no?) y a otras dimensiones, para así poder batallar con estos seres paranormales. Afortunadamente, el cineasta cambió de idea y terminó haciendo lo que vimos en pantalla.
Presupuesto
Sólo 25 millones de dólares bastaron para realizar la producción. No podían excederse, ya que tenían un cálculo anticipado del coste un poco limitado. Aunque te parezca una gran cantidad, en realidad no es tanto si se trata de proyectos cinematográficos.
Además, tuvieron el tiempo restringido, ya que sólo se pudo rodar en doce meses. También cabe destacar que los efectos especiales que se usaron, por más que actualmente parezcan de mala calidad, para la época eran muy buenos. Recordemos que el filme tiene ya 36 años (cumplirá en junio de 2020).
Mensaje sorpresa
En la cinta aparece un anuncio en la televisión para poder llamar a los cazafantasmas. En un principio, pensaron lo que todo el mundo: poner un número falso para que los fanáticos no llamaran. Luego, terminaron decidiendo que sería una buena idea poner un prefijo real, para dejarle un recado al público. Cuando los admiradores llamaban -durante el primer mes-, del otro lado del teléfono se oía una grabación de los actores.
Banda sonora
El tema principal del largometraje sigue sonando en el presente. El hit fue interpretado por el cantante Ray Parker Jr. No sólo logró llegar al primer puesto en las listas de Billboard Hot 100 el año en que se estrenó la producción, sino que esta canción es la segunda más identificada con Halloween (en el lugar número uno se encuentra Thriller, de Michael Jackson).
El famoso logo
Sin dudas, podés distinguir este dibujo habiendo visto (o no) la película. Este logotipo se encuentra dentro de los veinte más reconocibles del mundo, junto con el de Coca Cola o el de Superman. Según su equipo, está inspirado en Casper, el fantasma animado. Hasta la actualidad, este icono -que diseñó el productor Michael C. Gross- se lleva millones de dólares en merchandising.