Una cuenta falsa se hace pasar por el actor, y la diferencia es imposible de notar.
“Black Mirror” lo predijo, y ahora puede volverse un problema. Con el avance de la tecnología, los famosos se vieron envueltos en una nueva categoría de conflictos. Por medio de aplicaciones o efectos en redes sociales, cualquier persona puede simular dar vida a su artista favorito, o al que más detestan. Por supuesto, en un principio no fueron considerados casos relevantes porque la mayoría mantenían un deje de humor debido a la calidad precaria de la comparación. Sin embargo, en esta ocasión, un usuario de la popular plataforma logró realizar una réplica exacta y macabra de la estrella de “Mission Impossible” que preocupa a sus fanáticos y al resto de la industria.
Al utilizar una serie de imágenes y videos del intérprete, el programa identifica sus rasgos y movimientos faciales hasta alcanzar una perfecta versión para utilizar. Las ahora llamadas “máscaras digitales” se volvieron una polémica debatible, luego de viralizarse los fragmentos de un adulto que juega a ser Tom Cruise en TikTok. Bajo el nombre de @deeptomcruise, la cuenta se volvió tendencia cuando sus seguidores comenzaron a comentar que su versión y la real son terroríficamente similares e imposibles de distinguir (salvo por la voz y la altura del usuario, que difieren del actor). “Las nominadas Deepfake son aterradoras y se han apoderado de la plataforma. Cada figura pública debería estar allí con una cuenta verificada, incluso si no quieren crear contenido, para que sea más fácil identificar sus falsificaciones”, compartió en Twitter una seguidora, junto al material en cuestión.
Tras pasar algunas horas en tendencia, el misterioso hombre ganó 260.000 followers. ¿Podría el verdadero Cruise iniciar acciones legales? Según explica The Verge, en los términos y condiciones de la aplicación se prohíbe que una persona se haga pasar por otra, aunque @deeptomcruise sigue en línea. A pesar de que, de momento, este caso se trate de una broma inocente, se estima que las “máscaras digitales” podrían convertirse en el nuevo peligro de Hollywood. Hasta ahora, los acontecimientos conocidos más graves se tratan de caras de actrices en cuerpos de artistas porno. Pero, la posmodernidad promete ser sumamente macabra e impredecible.